La Policía Local detenía, hace unos días, a una mujer extranjera acusada de haber roto varias lunas de vehículos estacionados en la vía pública. Mientras tiraba piedras a la luna de un camión y varios automóviles, era vista por una persona que, más tarde, daría la pista a los agentes para encontrar a la autora de los hechos. Después de que el testigo de los hechos describiera al delincuente, los agentes se dirigían a un lugar donde, sospechaban, se encontraba la autora del delito. Efectivamente, la mujer extranjera era encontrada y detenida. La presunta autora de la rotura de los vehículos hacía caso omiso de las directrices de los agentes, insultándolos y amenazándolos, lo que les obligó a ponerle las esposas. Trasladada hasta las dependencias policiales, se constataba que la mujer también había sido acusada de herir a una persona con el cuello de una botella rota provocándole heridas.
Finalmente, la mujer era detenida acusada de varios cargos.
