POR SIEMPRE JAMÁS
Villa de Alhama se cita en esta ocasión con Diego y Lidia.
En la parroquia de San Lázaro, y como mandan los cánones, esta dulce pareja se han dicho su “ Sí Quiero formar parte de tu vida”. Una vida que inician con esta ceremonia a la que no le ha faltado detalle.
En la iglesia, la novia, ceñida en un espectacular vestido, hacía su aparición del brazo del orgulloso padrino, mientras el novio, nervioso y a su vez ansioso, esperaba en el altar. Lidia con su dulce niñez, se ha encaminado al encuentro de la persona que ya, y por siempre jamás formará parte de su vida.
Los invitados, cual aristocrática boda, han sabido combinar la elegancia y sencillez en sus atuendos, donde el color se envolvía en un halo de amistad, que hacia que la sola asistencia a este enlace fuese especial.
Realmente en esta ocasión no puedo parar de recordar cuando yo conocí a esta chiquilla que hoy se casa, sentada en su terraza jugaba con su perro a pasar la tarde, y me hace pensar en esos cuentos infantiles que pasando página a página, hacían que tus ratos de soledad se convirtiesen en eternas batallas, o simplemente en la ilusión de llegar a ese final en el que todo sea siempre feliz.
